lunes, junio 05, 2006

El Santo Ángel Guardián.


En 1888, S.L. Mac Gregor Mathers, otro de los fundadores de la Goldendawn; tradujo al inglés un manuscrito que encontró en la Biblioteca del Arsenal de París, cuyo título era: La magia sagrada de Abramelin el Mago, tal como se la transmitió Abraham el Judío a su hijo Lamech. Este manuscrito fechado en el siglo XVII, era a su vez traducción del original del siglo XV escrito en hebreo. A diferencia del resto de los grimorios medievales que se atribuían a Moisés, ó a Salomón. Abraham el judío fue un personaje histórico, judío alemán que vivió casi cien años entre el siglo catorce y el quince, famoso mago y alquimista, señalado como uno de los hombres más ricos de su época. Hay constancia de que llegó a entrevistarse con Enrique VI de Inglaterra, y los Papas, Juan XXIII –el primero que tuvo ese nombre-, Benedicto XIII y Gregorio XII y varios otros emperadores y nobles de Europa.
Durante uno de sus viajes en busca de la sabiduría, se enteró que en Egipto vivía un ermitaño reputado como mago . Abramelin, con el cuál vivió algún tiempo en calidad de alumno. Una vez que el egipcio, que era ya un anciano, se hubo convencido de las cualidades morales de su pupilo le mostró dos manuscritos que contenían la magia sagrada que el practicaba. Abraham el judío aseguraba que sus conocimientos y poderes eran el resultado de ésta enseñanza, así como la prosperidad y fama que lo acompañó en su vida.
Antes de morir Abraham les transmite a sus dos hijos sendos manuscritos, a José el mayor le da los secretos de la Cábala, y a Lamech el de la conversación con el Santo Ángel Guardián. En el medioevo circulaban infinidad de grimorios, algunos de ellos completamente disparatados, sin embargo la información que rescata Mac Gregor Mathers, se evidenció como uno de los tesoros espirituales más grandes al grado que se podría equiparar a la práctica de los países orientales.
Básicamente Abramelin, nos dice que todos nosotros tenemos un vínculo con un ser espiritual al que denomina Santo Ángel de la Guarda. Pero que hasta que logremos contactarnos con él, estamos reducidos a vivir a merced de las pulsiones de nuestra naturaleza inferior. Así pues, toda la práctica que nos propone, se encamina a lograr esa comunicación, ya que hasta que esto se logre, es inútil siquiera tratar de controlar las circunstancias de nuestra vida, puesto que no conocemos cuál es nuestra verdadera voluntad, y siendo así no estamos preparados para ejercer esa voluntad sobre el cosmos.
Una vez que logramos tener una comunicación fluida con nuestro S.A.G. –Santo Ángel Guardián, para abreviar-, éste se convierte en nuestro guía y consejero en nuestras actividades, encaminándolas al logro de la sabiduría suprema. Entre paréntesis, una de las aseveraciones peor comprendidas del Mago Aleister Crowley, era la siguiente; “Hacer tu voluntad, será la totalidad de la ley”, frase que no se entiende si no se considera que se refiere a la verdadera voluntad del mago, es decir a la que nos dictaba nuestro S.A.G..
Considerando que el resto de las prácticas mágicas de la época se encaminaban a lograr deseos más bien profanos, ésta propuesta es a la vez original y poderosa, porque nos dice que al tener una visión espiritual clara, el universo entero conspira a nuestro favor para encontrar el camino hacia su logro. El término S.A.G. utilizado en este contexto parece ser original de el libro. Aunque hay antecedentes históricos; Zoroastro nos habla del Agathosdaimon, un guardián espiritual personal, que hay que contactar antes de toda ceremonia mágica, éstos seres eran parte de la jerarquía de arcángeles caldeos. Los Platónicos, los nombraban Daemonos, señalando que todos tenemos asignado uno y son los encargados de escuchar nuestras oraciones. Sócrates le llamaba genio a tutor espiritual.
Es decir, en todas las culturas se habla de éstos contactos que nos sirven de guía, por lo que estamos aludiendo a una experiencia universal.
Para nuestra desgracia, en las religiones organizadas, se ha ignorado éste tema central, quizá porque la conversación con el S.A.G. es una experiencia personalísima y es imposible desarrollar un culto a partir de ella. Porque después de todo ¿Quién necesitaría un sacerdote que le transmitiera los deseos de Dios después de haberlos recibido directamente de su S.A.G.?
No debemos simplificar la naturaleza de éste ser, ya que es algo más trascendente que nuestras propia identidad proyectada, es por eso que Abramelin, no se toma la molestia en discutir acerca de él. Simplemente dice “Si quieres saber que es, pídele a tu ángel que te lo explique”.
El procedimiento para establecer contacto con el S.A.G de acuerdo al libro implica una ceremonia del al menos seis meses alejado del mundo, en plegaria y penitencia constante, Pero el método no es la esencia del mensaje, lo importante es saber que tal ser existe, y que nuestra devoción debe encaminarse a lograr establecer una relación armonica . Así pues, lo evidente es que nuestro Ángel está ansioso por hablarnos, pero que por decisión propia nos hemos alejado de nuestra esencia espiritual, lo cuál impide estrechar el lazo.
Otros magos han tratado de estandarizar procedimientos para contactar al S.A.G., pero no es la metodología lo que nos asegura el éxito, hay místicos que sin poseerla lo logran. El problema, creo yo es que confundimos mapa y territorio. Por seguir las instrucciones al pie de la letra nos volvemos demasiado analíticos, cuando es el corazón quién nos debe encaminar hacia ese logro. Es el amor que le debemos profesar a la parte más espiritual de nuestro ser lo que nos acerca a su lado. De la misma manera que un enamorado, piensa y vive para el objeto de su pasión; cada uno de nuestros actos cotidianos debe tener la intensidad del amor adolescente, pues debemos considerar que son el camino a encontrar nuestra verdadera voluntad. Para los hindúes, esta forma de devoción se llama Bakti yoga, y es la forma más rápida de iluminación.
Al final de la operación propuesta por Abramelin, se hace una ceremonia para desposar al individuo con su ángel que baja para unírsele, convirtiéndose a partir de ese momento en un solo ser re-unificado. Después de eso pasan tres días en completo arrobamiento, para posteriormente hacer que los cuatro príncipes del mal; Lucifer, Leviatán, Satanás, y Belial y luego el resto de los habitantes del inframundo, le hagan juramento de obediencia incondicional. Discutir el porque de ésta acción aparentemente disparatada, nos llevaría mucho espacio. Después de todo, el mago acaba de pasar seis meses buscando su aspiración más alta y parece un sinsentido regresar por un juramento de fidelidad diabólica. Quizá para abreviar podríamos decir que el mal en el universo podría entenderse como energía desquilibrada, ó aplicada en un lugar incorrecto y que al rescatar las partes oscuras de su ser, que están en relación a las jerarquías demoníacas. El mago las está sometiendo a su verdadera voluntad para convertirse en un ser integro liberado de las contradicciones que conviven dentro de cada uno.

3 comentarios:

Sator dijo...

Muy interesante e informativo tu escrito. Coincido en el concepto que la vía para lograr la Comunicación y contacto con tu Santo Ángel Guardián es muy personal. Deseo agregar dos puntos:

1) En la persepción de la realidad mágica moderna el SAG no es es un ser independiente o separado del hombre, de hecho ni siquiera existe un SAG para cada ser humano. El SAG se ha asimilado a los conceptos de "Ser Superior" o "Ego Uno", por lo que esta siendo compartido por todos, es la esencia misma de la unidad de la ola de vida (usando el termino dado por Dion Fortune) a la que llamamos humanidad.

2) El contacto, como la vida, es un proceso y no un evento aisalado, en el cual podemos identificar tres grandes etapas que coinciden con los tres grados iniciáticos reales:

Primer grado, el contacto y la comunicación con el SAG nos lleva a descubrir y ser plenamente concientes del propósito de nuestra vida, cual es la misión personal a desempeñar en el esquema evolutivo de mi alma y a hacernos responsables de nuestros actos.

Segundo grado, el contacto y comunicación con el SAG tiene lugar en Tifereth y se realiza la rendición del ego a la voluntad superior. Se entiende la función del salvador de la era y nuestros actos son alineados con dicha función.

Tercer grado, el contacto y comunicación con el SAG produce la integración del ser y se realiza la dedicación sin reserva. Se entiende que no hay separación, todos compartimos el mismo SAG. Se conoce y se sirve el propósito del Eterno.


Saludos

En L.V.X., Vida y Amor

Jorge Nájera

Eduardo dijo...

Estimados amigos ¿El contacto con el Santo Angel Guardian mediante el sistema legado por el sabio ermitaño Abramelin, es aún posible en estos días de intenso materialismo, maldad y corrupción?. ¿Como efectuar la operación de las seis lunas de penitencia y purificación sin haber tenido el legado del Maestro para realizar la Obra?
Ante tan grande misterio me siento pequeño e indigno, ojalá pudiera hallar al Maestro que me legara la Operatoria, no es cuestión de conocer el libro completamente, es necesario según lo dice el mismo libro acceder a la operatoria de algún adepto que haya efectuado todo el proceso, o sea un verdadero Mago Blanco o Iniciado. Dios quiera que alcance tan elevado don para ayudar a mis semejantes. Mientras tanto debo volver a los senderos del Eterno del cual he estado extraviado...

Caser dijo...

Tenga sobre ustedes una gran Bendicion, veo con gran asombro que en este blog han escrito personaas con un gran conocimineto sobre el tema y me gustaria que alguien me ayudace a entender mejor ese tema, dejo mi correo.

CASERLIBREALBEDRIO@hotmail.com