Todo aquello que negamos o reprimimos adquiere poder y eventualmente ha de manifestarse en nuestras vidas en forma bizarra. En otra entrada había mencionado el sistema de Abramelin para invocar a nuestro Santo Ángel Guardián como uno de los pilares fundamentales en la tradición mágica occidental, y describía que en la operación clásica el operador se apartaba del mundo para después de varios meses de purificaciones e invocaciones lograr contactar con su Yo superior- Agathosdaemon- Ángel Guardián, que a partir de ese punto se constituía en su guía siendo su primera acción la de convocar a toda la jerarquía infernal para exigirle un pacto de obediencia para con el mago.
De primera impresión parecería confuso que después de pasar tanto tiempo invocando lo más alto y puro el ser reunificado –Mago/Ángel- que surge de allí se interese por un pacto diabólico, el caso es que lo que se pretende en realidad es absorber y armonizar la energía contenida en las partes oscuras de la personalidad para ponerla al servicio de nuestros propósitos espirituales.
Pero ¿que son éstos seres infernales?. La Cábala dice que durante el proceso de creación del universo la energía de manifestación no pudo ser contenida por lo que parte de ella se desbordó creando un árbol de la vida paralelo “el reino de los qulipohots”. Esto nos indica que el mal es un problema de fuerza desequilibrada, o mal colocada y que necesita armonizarse para completar el plan divino. Ahora bien como es arriba es abajo y en el hombre están contenidos los mismos mecanismos del universo, así que es necesario traer a la conciencia nuestras partes no integradas para liberar la energía que contienen y reorientarla hacia nuestro desarrollo personal.
Estas afirmaciones pueden parecer demasiado oscuras pero se puede ver la cuestión desde un punto de vista moderno Se podría decir que el psicoanálisis se fundamente en una premisa muy simple, traer a la luz de la comprensión los mecanismos que empleamos para negociar con la realidad situaciones dolorosas. A partir del entendimiento se libera la posibilidad de reorientar la vida en formas más satisfactorias y productivas.
Ahora quisiera desarrollar el tema tomando como base una de las vertientes mágicas más arraigadas en la tradición occidental; Las Clavículas de Salomón. Durante el renacimiento y el medioevo era común atribuir los libros mágicos a personajes relevantes como Hermes y Salomón, así que las clavículas son una colección de libros que tratan con la invocación y evocación de ángeles y demonios para ponerlos al servicio del mago de la misma manera que según la tradición el patriarca construyó su templo sometiendo a los espíritus infernales que en número de 72 se presentan en la primera parte de éste libro conocida como Ars Goetia, Arte Goetico, ó simplemente como Goetia. Aparte de la descripción de éstos seres y su rango se dan instrucciones cuidadosas para evocarlos y el tipo de servicios que podemos obtener de ellos. El número 72 encuentra paralelismos en la tradición cabalística de la Shememphora ó nombre extendido de Dios del cuál se pueden derivar 72 nombres de ángeles que rigen cada cinco grados de la esfera zodiacal y que supuestamente vendrían siendo la antítesis de las entidades diabólicas.
El Goetia está disponible en la red junto con la información para trabajar en ésta modalidad mágica, así que no me voy a explayar en la técnica sino en lo pertinente a ésta entrada que es comentar que desde el punto de vista del esoterismo moderno los 72 demonios no se consideran como en la teología cristiana seres dedicados a tentar al hombre para lograr la perdición de su alma.
-entre paréntesis ¿se han fijado la tendencia que tienen las religiones fundamentalistas a manipular a la gente a través del miedo?, si Dios es amor y la antitesis del amor es el miedo podemos ubicar fácilmente el tipo de relación que tienen estas religiones con las realidades espirituales- .
El caso es que Aleister Crowley hace una observación genial con respecto a la Goetia al afirmar que los demonios son partes de nuestro cerebro, es decir nuestros miedos, complejos, neurosis, agresión, odios, envidias y la infinidad de defectos que preferimos reprimir ó negar en vez de trabajar conscientemente en ellos.
El peligro de operar con el Goetia es que se destapan construcciones mentales que al haberlas reprimido son particularmente amenazantes para el equilibrio mental del operador y que por otro lado están enlazadas con el inconsciente colectivo lo que exacerba su fuerza.
El mago que entiende la potencialidad de crecimiento que hay en dominar y encauzar nuestras pasiones gana en esclarecimiento y poder pero aquel que se dedica a evocar demonios-neurosis para satisfacer sus caprichos personales se pone al borde del abismo al caer en lo que los antiguos griegos conocían como hubris, el pecado por exceso de orgullo y confianza exagerada. Como dijo Eurípides:
Aquél a quien los dioses quieren destruir,primero lo vuelven loco.
De primera impresión parecería confuso que después de pasar tanto tiempo invocando lo más alto y puro el ser reunificado –Mago/Ángel- que surge de allí se interese por un pacto diabólico, el caso es que lo que se pretende en realidad es absorber y armonizar la energía contenida en las partes oscuras de la personalidad para ponerla al servicio de nuestros propósitos espirituales.
Pero ¿que son éstos seres infernales?. La Cábala dice que durante el proceso de creación del universo la energía de manifestación no pudo ser contenida por lo que parte de ella se desbordó creando un árbol de la vida paralelo “el reino de los qulipohots”. Esto nos indica que el mal es un problema de fuerza desequilibrada, o mal colocada y que necesita armonizarse para completar el plan divino. Ahora bien como es arriba es abajo y en el hombre están contenidos los mismos mecanismos del universo, así que es necesario traer a la conciencia nuestras partes no integradas para liberar la energía que contienen y reorientarla hacia nuestro desarrollo personal.
Estas afirmaciones pueden parecer demasiado oscuras pero se puede ver la cuestión desde un punto de vista moderno Se podría decir que el psicoanálisis se fundamente en una premisa muy simple, traer a la luz de la comprensión los mecanismos que empleamos para negociar con la realidad situaciones dolorosas. A partir del entendimiento se libera la posibilidad de reorientar la vida en formas más satisfactorias y productivas.
Ahora quisiera desarrollar el tema tomando como base una de las vertientes mágicas más arraigadas en la tradición occidental; Las Clavículas de Salomón. Durante el renacimiento y el medioevo era común atribuir los libros mágicos a personajes relevantes como Hermes y Salomón, así que las clavículas son una colección de libros que tratan con la invocación y evocación de ángeles y demonios para ponerlos al servicio del mago de la misma manera que según la tradición el patriarca construyó su templo sometiendo a los espíritus infernales que en número de 72 se presentan en la primera parte de éste libro conocida como Ars Goetia, Arte Goetico, ó simplemente como Goetia. Aparte de la descripción de éstos seres y su rango se dan instrucciones cuidadosas para evocarlos y el tipo de servicios que podemos obtener de ellos. El número 72 encuentra paralelismos en la tradición cabalística de la Shememphora ó nombre extendido de Dios del cuál se pueden derivar 72 nombres de ángeles que rigen cada cinco grados de la esfera zodiacal y que supuestamente vendrían siendo la antítesis de las entidades diabólicas.
El Goetia está disponible en la red junto con la información para trabajar en ésta modalidad mágica, así que no me voy a explayar en la técnica sino en lo pertinente a ésta entrada que es comentar que desde el punto de vista del esoterismo moderno los 72 demonios no se consideran como en la teología cristiana seres dedicados a tentar al hombre para lograr la perdición de su alma.
-entre paréntesis ¿se han fijado la tendencia que tienen las religiones fundamentalistas a manipular a la gente a través del miedo?, si Dios es amor y la antitesis del amor es el miedo podemos ubicar fácilmente el tipo de relación que tienen estas religiones con las realidades espirituales- .
El caso es que Aleister Crowley hace una observación genial con respecto a la Goetia al afirmar que los demonios son partes de nuestro cerebro, es decir nuestros miedos, complejos, neurosis, agresión, odios, envidias y la infinidad de defectos que preferimos reprimir ó negar en vez de trabajar conscientemente en ellos.
El peligro de operar con el Goetia es que se destapan construcciones mentales que al haberlas reprimido son particularmente amenazantes para el equilibrio mental del operador y que por otro lado están enlazadas con el inconsciente colectivo lo que exacerba su fuerza.
El mago que entiende la potencialidad de crecimiento que hay en dominar y encauzar nuestras pasiones gana en esclarecimiento y poder pero aquel que se dedica a evocar demonios-neurosis para satisfacer sus caprichos personales se pone al borde del abismo al caer en lo que los antiguos griegos conocían como hubris, el pecado por exceso de orgullo y confianza exagerada. Como dijo Eurípides:
Aquél a quien los dioses quieren destruir,primero lo vuelven loco.
P.d La imagen corresponde a Astaroth que al parecer es una deformación de la Diosa Astarte De acuerdo con Sebastian Michaelis es un demonio de primera jerarquía que seduce por medio de la pereza, la vanidad,y las filosofias racionalistas .Inspira a los matemáticos, artesanos, pintores y otros artistas liberales, puede volver invisibles a los hombres, puede conducirlos a tesoros escondidos que han sido enterrados por hechizos de magos y contesta a cualquier pregunta que se le formule en forma de letras y números en multitud de lenguas. De acuerdo a Don Milo Duquette, uno de sus conocidos invocó a éste espiritu que se presentó no en la forma de un duque sino como una intoxicadora belleza -Astarte- que estuvo a punto de sacar al mago de sus círculo de protección exacerbando su lujuria.
4 comentarios:
Excelente y, particularmente, aportativo al campo de la teoria y practica de la magia. Hoy dia no hay muchas producciones escritas en español que investiguen las operaciones magicas desde esta perspectiva. He leido ciertos textos de un frater, del que reservo su identidad en respeto a él, que correlaciona las operaciones con una perspectiva transpersonal.
Hay una anécdota que me sucedió siendo más pequeña y siempre me ha hecho reír. Cuando estudiaba la secundaria ( lo hice en un internado católico ) había una de las niñas que tenía una gran curiosidad por el ocultismo y la magia, tal vez porque su padre era Antropologo y llevaba a cabo una tesis de grado sobre formas étnicas religiosas. Cualquiera sea el caso, la niña descubrió que había una forma de "demonios" llamada Agathosdaemon. Claro está, que estoy convencida que ella no comprendía cual era el sentido metafórico y simbólico de la expresión, pero el caso es que después de escuchar durante años a las monjas llamándome "Hereje" y otras expresiones semejantes, comenzó a profesarme una especie de temor reverencial que nunca comprendí bien, hasta que años después - ambas convenientemente adultas - me habló sobre su temor que yo, pagana y "hereje" pudiera ser uno de esos demonios.
- Hasta el nombre lo tenías ¿No es cierto?
Siempre que recuerdo esa pequeña correlación de ideas, me pregunto hasta que punto el saber popular - esa pequeña grieta donde los conceptos más depurados van a morir por mera decisión - no es la forma de expresión más concreta de nuestra estructura mental. ¿Un demonio tal vez en si mismo?
Disculpa la divagación Sator. Como siempre, una entrada impecable.
Besos y saludos.
Y bueno en realidad la palabra Agatha que en griego es "bueno","bondad" si está relacionada con el término Agathosdaemon cuyo significado fue evolucionando pero que en general era el de su espíritu benigno. El error de la niña se debió a que confundía el término daemon con el de demonio. Un error común entre los cristianos.
Lo del colegio católico ya lo sabía por tus entradas, en México también es común - o era- mandar a las niñas a ese tipo de escuelas por consideraciones de estatus más que de calidad de educación, ahora ya no tanto porque las monjas no hablan buen inglés.
Considerando el mal rato que te hicieron pasar tus mentoras, habla muy bien de ti que no guardes rencores de ese período, yo ya les hubiera mandado unos cacodaemones para emparejar la cuenta. :). Tus anécdotas son deliciosas, siempre bien recibidas.
Es tanta e interesante la información que no puedo con ella, intenté leer lo mas que pude y dejaré que decante.
Volveré.
Te felicito.
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